SORPRESAS DEL CAMINO
Día 46 de ruta, 90 kms. Hoy salgo con el propósito de avanzar bastante; estuve mirando el kilometraje para repartirlo equitativamente en varias etapas, y he de realizar dos etapas de 90 kms, una de 80 y la última de 50 kms para poder visitar tranquilamente la ciudad de Santiago.
El problema nada más salir de Avilés ha sido la pérdida de las marcas,
lo que me ha obligado a realizar algunos kilómetros de más antes de salir y la consiguiente pérdida de tiempo preguntando a los ciudadanos.
Hoy hemos salido 4 ciclistas del albergue, pero uno se ha quedado a visitar Avilés y los otros dos a desayunar, así que sigo sola...
El recorrido de hoy, ha sido bastante rompe-piernas, pero como dice la guía:" nada fuerte a estas alturas".
A parte de mi visita turística extra, me he pasado una flecha amarilla y de repente he empezado a bajar. Preguntando si esa era la carretera que llevaba al siguiente pueblo, me han dicho que sí y que podía cruzar el pueblo que era muy bonito, para enlazar después con el Camino. El pueblo en cuestión era Cudillera, y al seguir bajando en un cruce he preguntado a un guardia que amablemente me lo ha confirmado. Al continuar bajando varios tramos más, no he podido remediar la exclamación ¡ Ay va la osti..!; una señora que pasaba por allí aún se debe estar riendo al oirme.
De repente, llego abajo donde se ven todas las casas colgadas en una bahía. Es precioso, pero se me alarga la ruta más de lo previsto y me está entrando un hambre atroz. Suerte de encontrar un caminante que me ofrece unos panecillos y dos melocotones. Los melocotones me han quitado un poco el hambre, pero en mi mente solo pensaba en comerme una buena paella.
15 kilómetros antes de donde tenía pensado parar a comer encuentro un menú para peregrinos a base de ensalada, paella y postre con bebida y por solo 6,50€; qué rico estaba!!!!..... gracias Camino.
Por la tarde sigo la ruta hasta la población de Luarca, que es donde tengo el albergue para hoy.
Espectacular panorámica de las casas de Cudillera.
Las tranquilas playas de la costa asturiana, después de abandonar el pueblo de Cudillera.
Vistas de la población de Luarca.
Día 46 de ruta, 90 kms. Hoy salgo con el propósito de avanzar bastante; estuve mirando el kilometraje para repartirlo equitativamente en varias etapas, y he de realizar dos etapas de 90 kms, una de 80 y la última de 50 kms para poder visitar tranquilamente la ciudad de Santiago.
El problema nada más salir de Avilés ha sido la pérdida de las marcas,
lo que me ha obligado a realizar algunos kilómetros de más antes de salir y la consiguiente pérdida de tiempo preguntando a los ciudadanos.
Hoy hemos salido 4 ciclistas del albergue, pero uno se ha quedado a visitar Avilés y los otros dos a desayunar, así que sigo sola...
El recorrido de hoy, ha sido bastante rompe-piernas, pero como dice la guía:" nada fuerte a estas alturas".
A parte de mi visita turística extra, me he pasado una flecha amarilla y de repente he empezado a bajar. Preguntando si esa era la carretera que llevaba al siguiente pueblo, me han dicho que sí y que podía cruzar el pueblo que era muy bonito, para enlazar después con el Camino. El pueblo en cuestión era Cudillera, y al seguir bajando en un cruce he preguntado a un guardia que amablemente me lo ha confirmado. Al continuar bajando varios tramos más, no he podido remediar la exclamación ¡ Ay va la osti..!; una señora que pasaba por allí aún se debe estar riendo al oirme.
De repente, llego abajo donde se ven todas las casas colgadas en una bahía. Es precioso, pero se me alarga la ruta más de lo previsto y me está entrando un hambre atroz. Suerte de encontrar un caminante que me ofrece unos panecillos y dos melocotones. Los melocotones me han quitado un poco el hambre, pero en mi mente solo pensaba en comerme una buena paella.
15 kilómetros antes de donde tenía pensado parar a comer encuentro un menú para peregrinos a base de ensalada, paella y postre con bebida y por solo 6,50€; qué rico estaba!!!!..... gracias Camino.
Por la tarde sigo la ruta hasta la población de Luarca, que es donde tengo el albergue para hoy.
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